Problemas en la sanidad británica | Infomed Dental

Problemas en la sanidad británica

Algunos pacientes británicos se arreglan la boca ellos mismos ante la falta de dentistas en el sistema de sanidad públicaUn sondeo realizado a 5.200 pacientes británicos indica que una de cada cinco de estas personas no encuentra un especialista en el Sistema Nacional de Salud británico (NHS) y se abstiene de recibir atención dental por el gasto que supone acudir a la consulta privada. Este motivo ha llevado al seis por ciento de los pacientes a resolver los problemas bucales por si mismos, arrancándose las muelas enfermas.


Uno de los casos más extremos es el de un paciente de Lancashire, que asegura haberse arrancado él mismo catorce dientes con unas tenazas. Entre los encuestados, también se encuentra una persona que se ha tapado un diente con masilla, otra que admite haber utilizado cola adhesiva para pegar una corona y una tercera que ha recurrido al destornillador para eliminar la placa dental.


El ministro británico de la Salud, Ben Bradshaw, afirma que hay problemas en algunas zonas del país para obtener citas en el servicio público, pero que no hay razón para que se llegue a situaciones extremas. La solución está en que los pacientes ejerzan "el derecho de exigir una cita urgente a los servicios locales".


Las dificultades de los dentistas

Según el estudio, para el que se entrevistó también a 750 profesionales, muchos dentistas han abandonado el NHS por considerar que no ganan lo que les corresponde. Otros se quejan de que se ven obligados a ver a tantos pacientes que no pueden proporcionarles un buen servicio. Como consecuencia, un 45 por ciento se niega a admitir a más pacientes.


Para la mayoría de los dentistas consultados, el sistema ha empeorado desde que el Gobierno introdujo un nuevo contrato para los profesionales en abril del año pasado. Antes, un chequeo dental por el sistema público costaba unos ocho euros, un empaste, unos 15, mientras que una corona de oro tenia un coste de 138. El contrato sustituyó los costos de cada operación individual por un sistema de "banda" con tope máximo de 281 euros.

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