La anestesia | Infomed Dental

La anestesia

La ADA recomienda el uso seguro de las técnicas anestésicasEl uso de técnicas anestésicas forma parte de la práctica clínica cotidiana del odontólogo. Esto se debe a que hay ciertos procedimientos que precisan de anestesia, y además hay pacientes ‘especiales’, (niños, enfermos mentales...) a los que se aconseja utilizarla para evitar complicaciones.
El uso de técnicas anestésicas y de fármacos ansiolíticos tiene como objetivo disminuir el dolor y la posible ansiedad que este dolor ocasiona al paciente.
El odontólogo puede ayudar al paciente a superar el dolor y el miedo al dentista de dos maneras; mediante técnicas psicológicas y mediante técnicas farmacológicas.
En relación con las técnicas psicológicas el doctor usa las terapias conductuales, con la intención de modificar la conducta del paciente. Estas técnicas solo servirán para tratar problemas de ansiedad provocados por el miedo que le produce al paciente la visita al odontólogo.

Recursos
Los recursos farmacológicos de los que puede disponer el odontólogo son anestésicos locales; sedantes o anestésicos generales.
Los anestésicos locales producen un bloqueo local de la conducción de los impulsos nerviosos sensoriales que se dirigen a las terminaciones nerviosas periféricas hacia el sistema nervioso central.
Los sedantes son de gran ayuda por sus efectos sobre la ansiedad en dos vertientes; sobre la actitud del paciente y por su efecto farmacológico, ya que una de las propiedades de la sedación es la inducción al sueño.
Y, por último, están los anestésicos generales, que representan un complemento en los procesos quirúrgicos, ya que mantienen al paciente inconsciente y sin posibilidad de respuesta ante el estímulo doloroso que implica todo acto quirúrgico.

Recomendaciones
La ADA recomienda el empleo de la anestesia, realizada por un profesional preparado. Por eso la ADA habla de una adecuada formación del odontólogo; para saber usar los recursos adecuadamente, utilizar un reglamento y para ponerse al día en los últimos avances en técnicas anestésicas. Por tanto la recomendación que se hace es que practiquen la anestesia sólo los odontólogos con formación especializada.
A pesar que la anestesia sea administrada por un profesional, cualquier fármaco o procedimiento clínico tiene la posibilidad de presentar efectos adversos o complicaciones. La ADA advierte que el odontólogo debe tomar una serie de precauciones:
El dominio del fármaco o técnica usada; debe mantenerse el contacto visual con el paciente; debe realizarse la motorización de sus constantes vitales; deben registrarse todos los procedimientos realizados al paciente; es imprescindible contar con el personal sanitario cualificado; deben recibir atención especial los pacientes cuyas patologías pueden sufrir un empeoramiento debido al estrés que supone cualquier procedimiento quirúrgico; el doctor está obligado a hacer una exhaustiva evaluación preoperatoria; y es necesario disponer de un equipo de emergencia.
Todo ello es para minimizar el riego de su intervención.

Resumen
Lo que resulta más útil para el odontólogo es la evaluación clínica del paciente (revisando todo su historial clínico), una adecuada preparación prequirúrgica (donde se determinará la capacidad basal del paciente, la cantidad necesaria de oxígeno para la operación y la proporción de todas las indicaciones que puedan ser útiles al paciente).
En cuanto al equipo técnico, debe calibrarse y revisarse periódicamente; comprobar la oxigenación del paciente, la correcta ventilación, evaluar la frecuencia cardíaca y continuar la monitorización durante el postoperratorio.
Por último, para dar de alta al paciente, es imprescindible que reúna criterios de restablecimiento total.

Su voto: Ninguno (1 vote)